Sabemos que la década de los 90 fue la época dorada de los supermodelos como Cindy Crawford, Naomi Campbell, Christy Turlington, entre otras. Aquellas solían ser curvilíneas, altas y con una cara hegemónica, pero apareció Kate Moss para romper con ese canon de belleza. Moss era baja, sin curvas, con una cara de alienígena. Sin embargo, ese aspecto le abrió puertas en la industria de la moda, llegando a trabajar con marcas como Calvin Klein, Versace, Chanel, Missoni, etc. Pero sin duda alguna, sus looks en cada evento fueron los que cautivaron al mundo, ya que Moss marcó tendencias desde esa década y hoy por hoy se siguen usando.
Podemos hablar del vestido lencero con transparencia que lució en la fiesta de la agencia de modelos Elite en 1993. Fue el centro de atención en aquel evento y sirvió de inspiración en la colección primavera/verano de 2022 de marcas como Eytys, Dsquared2, Blumarine o Supryila Lele. En su primer Glastonbury en 2005, creó el uniforme para ir de festival al usar minifaldas, cinturones de lentejuelas, bufandas al cuello extra delgadas y las botas Hunters. Cuya marca abrió una tienda en Nueva York un año después de que lo usará en el festival de música.
El clásico little black dress, es decir, un mini vestido que marcó historia en el Festival de cine de Cannes junto a Johnny Depp. Han pasado años y no ha sufrido el paso del tiempo. En la colección de Ernmanno Scervino de primavera-verano 2022, se encargaron de traerlo nuevamente con detalles propios. Además, la encargada de protagonizarlo fue nada más ni nada menos que su hija Lila Moss. Sin duda, la supermodelo ha sido una inspiración para diseñadores y para las nuevas celebridades que emergen hoy en día.
Créditos Fotos:
Imagen 1: Matt Cardy
Imagen 2: Dave Bennet
Imagen 3: Kevin Mazur
Imagen 4: MJ Kim