Nunca imaginé que un destino fuera hacerme sentir tanto en tan poco tiempo. Desde que llegué supe que este sería un viaje muy especial. Punta Cana no fue solo playa y sol, también fue lluvia. Resulta que en la temporada en que yo viajé, era época de tormentas, pero gracias a eso pude ver de muy cerca un arcoíris por primera vez en mi vida, fue una experiencia increíble. Dicen que Punta Cana es el paraíso del caribe, todos los días llegan personas de todo el mundo y los resorts generalmente siempre están llenos, por lo que es mejor hacer todo con las respectivas reservaciones.
En esta oportunidad celebrábamos la boda de una amiga en el hotel Hard Rock de Punta Cana, yo me hospedé en el resort de al lado llamado Riu, por un tema de tranquilidad y comodidad. Para ingresar a la boda tuvimos que pagar el day pass del hotel Hard Rock y la ceremonia fue en la playa. Todo estuvo increíblemente organizado, muy lindo, excepto porque empezó a llover torrencialmente y nos quedamos sin música. Pero eso no impidió que disfrutáramos de la noche.
Lo bueno de estos resorts es que son all inclusive, es decir, todo incluido y puedes comer y tomar lo que desees y cuanto desees, el único problema es que no siempre la comida es buena. Dando una opinión personal entre estos dos hoteles, el Hard Rock es mucho más grande y moderno, pero la comida en el Riu es mucho más rica. Nosotras nos quedamos por 4 días y 3 noches, pero para ser sincera nos parecieron una semana, es como si en Punta Cana los días pasaban más lento.
